Fue sede esta semana de la asamblea anual de Great Wine Capitals, que reunió a delegaciones de otros 10 destinos de cuatro continentes para trabajar en conjunto. Negocios, sustentabilidad, manejo del agua, inclusión y empleo fueron algunos de los ejes discutidos con la meta de incrementar el nivel de actividad hasta superar los niveles de la prepandemia.

Durante cinco días, Mendoza fue el epicentro del enoturismo mundial: la provincia cuyana albergó a delegaciones de otros 10 grandes destinos de cuatro continentes en los que la industria del vino germina todo el año.

Responsables de negocios, funcionarios, encargados de promoción y marketing, enólogos, sommeliers y periodistas confluyeron allí en Mendoza Cumbre Capitales del Vino (Great World Capitals, GWC) para debatir cómo potenciar el crecimiento de la actividad, garantizar la sustentabilidad y promover el intercambio comercial entre la provincia y las ciudades de Adelaida (Australia), Bilbao (España), Burdeos (Francia), Lausana (Suiza), Mainz (Alemania), Porto (Portugal), San Francisco (EE.UU.), Valparaíso (Chile), Verona (Italia) y Ciudad del Cabo (Sudáfrica).

Desde el 30 de octubre hubo charlas sobre tendencias en el consumo de vino, inclusión, manejo racional del agua y arquitectura; recorrida por bodegas; noches con tango y con folklore; clases de cocina; catas de etiquetas internacionales y visitas a emprendimientos hortícolas y aceiteros fueron algunas de las acciones compartidas.

La primera actividad de la Conferencia anual de la red GWC, organizada bajo el lema Vinos para un mundo nuevo, fue una visita a la bodega Casarena, en Luján de Cuyo, que abrirá al público su restaurante sustentable el 21 de diciembre de martes a domingos y solo para almuerzos, con 68 cubiertos.

Fue construido con tierra del lugar en sus paredes y madera reciclada, y nueve meses al año no requiere ni de calefacción ni de refrigeración. Ya funciona para eventos privados y degustaciones. Y para lo que los miembros de las delegaciones pudieron disfrutar: una clase de cómo cocinar empanadas que dio su chef, Aylin Rosas.

“Hace cuatro meses comenzamos con las visitas. anticipó Sebastián Vélez Romero, gerente de Marketing de la bodega, que está en transición hacia la producción orgánica y tiene un 75% de personal femenino, incluyendo a la enóloga, la CEO, la chef y la jefa de calidad. El brindis fue con el fresco Malbec Rose 2022.

Al día siguiente, las comitivas se trasladaron para otro estreno: pudieron conocer la recientemente presentada Casa David Wine & Horses, una propuesta deslumbrante que en 50 hectáreas une viñedos y cría de caballos de salto de genética premium.

En actividad desde hace cuatro años, abrieron ahora sus puertas en Alto Agrelo a estos visitantes internacionales para mostrar sus instalaciones y ofrecer una cena en su espacio gastronómico de 350 m2, previo paseo en carruajes históricos, de 1870 a 1940, y recital de un coro formado por 20 niños de ascendencia eslovena y todos de la misma familia.

Una vez que se puso el sol, las emociones se sucedieron puertas adentro. Una cava subterránea con encanto y sala de degustación precedía a una tienda con estantes llenos de conservas que ya tientan, aunque todavía no se venden al público porque están terminando de definir los packagings.

Los jamones caseros llaman la atención casi tanto como las esculturas y pinturas de artistas emergentes y consagrados de Mendoza que completan el ambiente de este emprendimiento familiar gestado por Oscar David y sus cuatro hijos en el que crecen uvas Malbec, Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc y Chardonnay.

Muy cerca de los viñedos, varios jinetes practican salto en este lugar cuyos dueños anhelan que pronto sea sede de una fecha del calendario internacional del deporte. El establecimiento cuenta un club house, 24 boxes de cría, una enorme piscina para entrenamiento sin impacto y rehabilitación y un laboratorio veterinario de alta tecnología en el cual hacen transferencia de embriones para obtener caballos con mucha fortaleza y a la vez buen carácter.

“La provincia exhibirá en estas jornadas todo su potencial y el plan de posicionamiento estratégico de la bebida nacional: desde los 4 globos aerostáticos que ahora tiene Junín para sobrevolar las viñas hasta propuestas de trekking, yoga, astroturismo, eventos literarios y muchas más actividades en las que el vino es protagonista.

Tenemos casi 1000 bodegas de las cuales 176 están abiertas al público. Las más antiguas se están reconvirtiendo con áreas de hospitalidad, las más nuevas se construyen con el enoturismo ya en el masterplan”, dijo a Vinómanos Nora Vicario, ministra de Cultura y Turismo de la provincia.

La funcionaria también destacó que en paralelo con la consolidación del Malbec, que distingue a Mendoza en el mundo, se están jerarquizando cepas como el Bonarda con un plan específico de desarrollo en el este de la provincia; se regularon actividades como el glamping, que funciona ya en varias de las 19 reservas naturales, y se capacitó en idiomas, gerenciamiento y marketing a los responsables de emprendimientos turísticos que llevaban dos décadas en funcionamiento sin profesionalización.

“Queremos hacer hincapié en productos identitarios y en la reutilización del agua, y como desafíos seguir mejorando la infraestructura, la conectividad aérea (estamos trabajando para tener por ejemplo vuelos directos con Asunción, desde donde hay alta demanda de bodas en la provincia), los servicios y los destinos emergentes, como Malargüe. En 2022 tuvimos ocupación plena todo el año, pero para sostener el crecimiento la experiencia debe ser integral: el vino no sucede solo en las bodegas”, agregó.

El lunes, en un salón del Hotel Sheraton, se desarrolló la apertura oficial de Mendoza Cumbre Capitales del Vino. Allí, la presidenta de GWC, la mendocina Mariana Juri, anunció que los integrantes de la red trabajarán en el desarrollo de una “Diplomatura conjunta entre universidades de los países miembros” y en fomentar el intercambio de profesores y estudiantes.

Además, se buscará sumar ciudades a las actuales 11, incrementar los niveles de empleo, expandir la sustentabilidad de la industria y apoyar a los emprendedores del sector, con la premisa de que el vino “sea un aporte para el bienestar de los pueblos y crezca hasta superar los niveles de negocios de la pre pandemia”.

“El vino excede lo que sucede dentro de la copa. Tenemos que trabajar para ofrecer oportunidades a las comunidades rurales y nutrir la cadena de valor de miles de PyMES”, se comprometió.

Bodega Durigutti, en Las Compuertas, albergaba para los delegados de la cumbre el siguiente spot por descubrir. El viñedo es una realidad desde hace 20 años, pero en abril pasado los dos hermanos responsables del proyecto sumaron el restaurante 5 Suelos Cocina de Finca, a cargo de la premiada Patricia Courtois.

La cocinera les propuso cinco pasos. Una de las opciones incluía por ejemplo un aperitivo con vermú hecho en la bodega (en proceso de salir a la venta); una sopa de ajo, zanahoria y crema; un soufflé de quesos con vegetales; un risotto y un postre con chocolate amargo y berries.

La noche llevó a los visitantes a Finca Paraíso, que la bodega Luigi Bosca acaba de inaugurar en Maipú, para eventos y como restaurante, en una magnífica casona. El anfitrión, Alberto Arizu, cuarta generación de bodegueros, emocionó a los asistentes con el relato del esfuerzo de su abuelo Leoncio, que compró la propiedad en 1926. “El granizo le hizo perder toda la cosecha cuatro años después, y en 1934 decidió llevar adelante la vendimia con el agua a la cintura.

“Mendoza es el único oasis de vino del mundo que se hizo realidad con el esfuerzo de inmigrantes. Por eso nuestras etiquetas tienen la grandiosidad italiana, la finesa francesa, la precisión alemana y la alteza hispana y argentina”, definió.

En Finca Paraíso se ofreció un show de baile y canto folklórico y una cena a cuatro manos, a cargo de dos chefs mendocinos -Patricia Roggerone y Pablo del Río- con empanadas y guiso de lentejas, maridados con los mejores vinos Luigi Bosca.

Al día siguiente, Carlos Pulenta fue el winemaker anfitrión en Vistalba, proyecto que se convirtió en realidad tras siete años de trabajo. Hizo sonreír a las comitivas cuando contó que fueron pioneros hace 20 años en el uso de tanques de concreto (con control de temperatura), no por vanguardistas sino “porque no había un peso para los de acero”.

En esa bodega (con viñedos también en Valle de Uco) llevan adelante la transición de riego tradicional a goteo en sus 50 hectáreas, y planean ahora construir una represa para sus viñas, que datan de 1940.

“Vamos de a poco arrancando y plantando de nuevo”, explicó el ingeniero agrónomo Facundo Yasli, mientras la sommelier Carolina Kirkwood mostraba en el subsuelo una calicata de varios metros de altura que dejaron al descubierto para que los visitantes aprecien ese suelo árido, bien compacto en su parte superior y luego pura arcilla y canto rodado.

Desde allí las delegaciones se trasladaron a Maipú para visitar Aceitaia Millán, elaboradores del aceite de oliva Laur, premiado como el mejor del mundo de acuerdo con el ranking de AOVE 2021. Tienen olivos de 130 años en plena actividad (en este momento florecidos) y ofrecieron una cata de aceite y aceto que deslumbró a los visitantes por su calidad: la variedad de mayor calidad de aceite demanda hasta 20 k de aceitunas para obtener un litro. Luego la comitiva fue recibida en Bodegas López, también en Maipú, donde además de una recorrida hubo una jornada de networking con discusiones sobre geología, cultura, identidad y hasta astronomía como faceta del enoturismo.

En paralelo, otro grupo de participantes de la cumbre fue a conocer tres bodegas de arquitectura impactante: Catena Zapata, Andeluna y Diamandes.

El día siguiente dio espacio al paseo. Los delegados remontaron el río Mendoza hasta pasar las termas de Cacheuta y llegaron hasta el dique Potrerillos. También hubo un almuerzo y una clase de yoga en el Hotel Potrerillos.

En la noche de la cuarta jornada, Casa Malbec, en Chacras de Coria, fue el espacio donde los participantes de la Asamblea pudieron hacer una completa degustación internacional de vinos, maridada con cocina regional.

En el Auditorio Bustelo se desarrolló el último día del encuentro, con expositores nacionales e internacionales. El profesor Armando Corsi, director del Grupo de Negocios del Vino de la Universidad de Adelaida, Australia, abrió las ponencias y anticipó de forma virtual las 7 tendencias mundiales de consumo para la bebida nacional.

Luego, la arquitecta Eliana Bórmida, asesora de la Unesco, expuso sobre el paisaje cultural e histórico del enoturismo, y el enólogo y músico Marcelo Pelleriti contó su experiencia al frente de Winerock, en su bodega Monteviejo, en el Valle de Uco.

La presidenta de la Asociación de Sordos de Mendoza, Mariana Martínez, explicó más tarde que junto con Wine Institute crearon una app gratuita con 86 señas que conforman un glosario del vino único en el mundo, disponible con subtítulos en español, inglés, francés y portugués.

Finalmente, el ingeniero Sergio Marinelli, director del Departamento General de Irrigación de Mendoza, advirtió que la provincia se encuentra en una situación “tremendamente preocupante” desde el punto de vista de la existencia de agua, y detalló los programas vigentes para combatir la actual sequía, que se proyecta como permanente.

La Asamblea anual de Mendoza Cumbre Capitales del Vino se cerró con una cena en Bodega Los Toneles, en las afueras de la ciudad de Mendoza, y la entrega de premios a los mejores emprendimientos de turismo enológico provinciales e internacionales.

La próxima edición de la Mendoza Cumbre Capitales del Vino tendrá como anfitriona a Lausana. Será una inmejorable ocasión para volver a analizar en conjunto estrategias de crecimiento, generación de empleo e intercambio comercial. Y para probar todos los maridajes posibles entre vino y chocolate.

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